Era una noche refrescanta en Soria, estabamos yo y mi mejor amigo y solo nos acompañaba un monton de estrellas en el cielo, que lujo es poder disfrutar de todas ellas. Esa noche recorde y comparti una anecdota que unos la catalogan de estupida yo lo llamo fantasia. Como muchos niños me encantaban los animales (y me siguen gustando) y de pequeño me acuerdo que me regalaron la tipica granja con sus tipicos animales: vaca, cerdo, caballo, oveja y gallina. Me detendré con este ultimo animal, tenia una obsesion con la gallina y es que no entendia como yo miraba el corral cada mañana tras despertarme y no ponia huevos... era raro. No lograba entenderlo. Pensaba que lo que yo veia cada mañana de verano en mi pueblo con mi abuela en el corral eran huevos, lo creia porque yo era quien los recogia, ¿Por qué en mi granja de Madrid no ocurria lo mismo?.
Este problema se lo repetia a mi padre dia tras dia: "Papá mi gallina no pone huevos ¿Qué hacemos?". Mi padre un día yo creo que porque era un cansino en toda regla puso un huevo de verdad en mi granja... a la mañana siguiente yo una vez mas me levante de la cama y lo primero que hice fue mirar el corral de la gallina.. y alli estaba el huevo y alli esta mi cara de felicidad, corriendo fui a la cocina con el famoso huevo a enseñarselo a mis padres.
Durante mucho tiempo fui feliz porque creia en la magia, porque estaba dentro de un mundo de fantasia, porque era un niño y pensaba que todo se hace posible de ahi a decir...cuando aquello era fantasia...
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